Hoy en día nadie puede poner en duda que la educación en términos generales, y por ende, la forma de enseñar y aprender, los contenidos enseñados, la metodología utilizada… etc., ha ido evolucionando a lo largo de la historia. El preguntarse el por qué de las cosas e intentar responderlas, es desde el principio de los tiempos, una necesidad del ser humano que le ha hecho evolucionar y crecer. Los acontecimientos históricos, la realidad social y política y aspectos contextuales han ido determinando el cómo, el por qué… etc. de la educación. Desde los escribas con sus tablillas de barro en Mesopotamia hasta llegar a nuestros días, con la implantación de las nuevas tecnologías, la escuela, los docentes y los alumnos han ido cambiando y evolucionando.
El portafolio es, sin lugar a dudas, una herramienta de enseñanza muy importante, que surge a partir de la implantación del uso de Internet. Una de sus principales ventajas, que al menos bajo mi punto de vista, es la más importante es que facilita el aprendizaje activo y promueve la colaboración. El portafolios es una colección de trabajos que el estudiante va realizando en un periodo concreto de su vida académica, en él, muestra sus logros, sus destrezas y su talento en un campo determinado, en nuestro caso, a través de nuestros blogs. El portafolio además supone un valor añadido, ya que pone de manifiesto los intereses y personalidad del estudiante, demostrando su esfuerzo, y favorece la participación colaborativa del profesorado y de sus compañeros… (Estoy segura que todos nos acordamos de la Zona de Desarrollo Próximo de Vigotsky y el constructivismo).
A continuación, y por no extenderme mucho en mi reflexión, paso a destacar las que, bajo mi punto de vista, son las características principales del portafolios:
- Involucra activamente al estudiante. Considera al estudiante como centro de su aprendizaje.
- Promueve la posibilidad de integrar los aprendizajes de un modo positivo, progresivo y consciente.
- Promueve la creatividad y la auto-reflexión.
- Facilita el aprendizaje constructivo.
- Promueve la colaboración y el trabajo en grupo, analizando, aclarando, evaluando y explicando su propio proceso de aprendizaje y comprendiendo el proceso de enseñanza y aprendizaje de los otros (profesor y compañeros).
- Se fundamente en la redacción, y ésta es un medio facilitador del aprendizaje ya que fomenta la reflexión. (¿qué quiero decir?, ¿Cuál es la información relevante?, ¿cómo quiero decirlo?....).
- Pone énfasis de las destrezas del pensamiento crítico.
Si bien es cierto que tiene todas estas virtudes, destaco como dificultad, el gran compromiso y motivación que supone tanto por parte del estudiante, como por parte del profesorado.
Os dejo algún enlace de artículos relacionados con el tema que me han resultado interesantes:
Ficha el Portafolio del estudiante.
El portafolio docente como estrategia formativa y de desarrollo profesional.
El portafolio electrónico como metodología innovadora en la evaluación universitaria: el caso de la OSPI
Seguimos caminando...
Ana.
